INFORMACIÓN TURÍSTICA
DESCRIPCIÓN DESTINO
Para llegar a las casas cueva de Libros hay que tomar la N-330, carretera de Teruel a Cuenca y a 28 km. de Teruel encontramos la localidad de Libros. Un poco más abajo, en el cruce del puente de «La Zofrera», se toma la TE-V-6012 dirección a Riodeva. Continuar hasta encontrar una estatua de un dinosaurio, aparcar y comenzar una caminata hasta llegar al antiguo poblado minero «Barrio Las Minas», antigua explotación minera de azufre que comenzó a finales del s. XVIII (1.777) trabajándose a intervalos hasta que se cerró en 1.889.
En 1.906 se retomó la explotación por la compañía «La Industrial Química» de Zaragoza. El negocio de la extracción de azufre atrajo a familias que se fueron a vivir cerca de las minas. Con un total de 1.000 mineros y unos 2.000 habitantes en total. Había escuela, cuartel de guardia civil, hospital, panadería, carnicería, economato, casas de directivos, varias tascas y una iglesia también excavada en la roca muy bien conservada.
Inicialmente las casas de los trabajadores y sus familias eran cuevas excavadas por ellos mismos en la montaña; constan de una estancia utilizada como sala de estar-comedor, cocina y una o dos alcobas, algunas con espacio para los animales (burros, mulas, gallinas, etc.) que trabajaban también en la mina. Cada puerta estaba pintada de un color diferente. Los techos son tan bajos, que hay que agacharse. Más tarde, se creó el primer barrio formado por casas de dos plantas con viviendas independientes. Poco a poco el barrio fue creciendo y se construyó otro, y después otro conocido como el barrio chino. Hasta mitad del siglo XX muchas familias vivieron en las más de 100 cuevas del poblado minero de Libros, se estima en unas 130 casas cuevas.
En 1.956 se cerraron las minas, la compañía vendió la madera y todos los edificios fueron derruidos para sacar las vigas. Hubo expolio de todo aquello que tuviera algo de valor y el poblado se abandonó. En la actualidad el pueblo se encuentra en ruinas, pero gracias a los trabajos de restauración realizados por Julián Martínez, se pueden visitar 12 cuevas que permanecen abiertas al público con visita gratuita. Conservan herramientas y pertenencias de la época. También se puede entrar a la antigua mina de azufre.
Cada casa cueva tiene un nombre.